La luna ha decidido desaparecer de mi cielo
mientras las estrellas se cubren entre las nubes que vaticinan mi tempestad
y llueve sobre mí,
tristeza y desamparo
el llanto del poeta que se niega a morir,
y la cruda realidad que mata toda utopia,
dejandome en la totalidad de la nada.
Henme ahi,
sin moverme
sin articular gestos ni palabras,
sencillamente empapandome de la agonia de un alma que otrora era celeste
pero que ha caido como lucero
su seguridad se ha desvanecido
y como caminando sobre un lago congelado
nota como el hielo se quiebra bajo sí.
Tomo una daga afilada
y conteniendo la respiracion
cerceno mis alas inmerecidas
y lavo mi rostro con su sangre.
He caido y no era asi como queria terminar
oculto en las tinieblas
escapando de la mirada que todo lo ve
y temiendo que aun me ame.
Aun me ama?
su enojo me dice que no.
Huire al desierto y en él me confundire
con el ardor de la arena
y el frio del atardecer.
Huire al desierto
y en él esperaré
a que Quien amo, me ame
y a Quien amo olvidaré...
0 comments: